Es más que un eslogan impreso en una camiseta. Es más que un hashtag y no es sólo para las redes sociales. Ser tú es una acción que requiere valor, fuerza y vulnerabilidad. No siempre es fácil ser uno mismo, pero merece la pena cuando ves los resultados.

Cuando somos más auténticos, nos sentimos más conectados con los demás y con nosotros mismos. Somos capaces de compartir nuestras ideas con confianza y nos sentimos cómodos compartiendo nuestras emociones con los demás. Cuando somos más auténticos, la gente se siente segura a nuestro alrededor porque saben quiénes somos y saben que no tendrán que adivinar lo que haremos a continuación o dónde tenemos la cabeza durante una conversación.

Cuando somos nosotros mismos, la gente no siente que tiene que andar con pies de plomo a nuestro alrededor: ¡ellos también pueden ser ellos mismos!